viernes, 25 de noviembre de 2016

cada atardecer

¿sabrán los perros
que el sol está cayendo
y por eso ladran,

habrá en algún lugar del planeta
alguien que mire como yo miro
la luz rosa,

estará mi madre
en otro plano
esperándome,

podré dormir bien esta noche,

habrá fin para la tristeza,

será esto
lo que se puede hacer,
a pesar de todo,
para ser feliz?


jueves, 24 de noviembre de 2016

Freddie

I
Puse un disco de Queen para escribir.
"A night at the opera", mi favorito
Hoy se cumplen 25 años de la muerte de Freddie Mercury.
Recuerdo ese día. Yo tenía 9 años. Llovía. Estaba en la salita, el lavadero de la casa. Había puesto el grabador rojo sobre el lavarropas, escuchaba la radio en la que Daisy May Queen tenía un programa. Recuerdo su voz anunciando la noticia. Pasaron temas de Queen toda esa tarde y Daisy hablaba bajito.

Mamá estudiaba en la cocina. Tenía un final. Me había pedido que no la molestara, pero yo quería que lo supiera. Mamá, murió Freddie, le dije. Ella apenas se lamentó un poco, pero siguió estudiando, como si nada.  Yo no podía entender cómo. Siempre le había gustado Queen a mamá. Era su banda favorita. Cuando vinieron a la Argentina, ella no pudo ir. "Lo vi desde la tele. Tu papá se quedó dormido. Me hubiera encantado ir."

Entonces ¿por qué no lloraba? ¿Por qué no dejaba de estudiar, y se entregaba a escuchar los temas que pasaban por la radio conmigo? Quietas las dos, rodeadas de la música y las palabras hasta que la muerte fuera algo que pudiera entenderse.

"Tengo que estudiar", me dijo. Me enojé con ella. Volví a mi bunker. Daisy May Queen ahora hablaba de las últimas palabras de Freddie y de la última canción que grabó. "Estos son los días de nuestra vida". Esa canción era su despedida.

Mamá aprobó. Pero Freddie ya no volvería.

II

En casa pensaron que se me iba a pasar, pero no. Cada vez me volvía más y más fanática. Compraba cancioneros de Queen y traducía las letras. Grababa videos y canciones en la Radio. Una vez salió un especial de 13/20 sobre Queen. Poster enormes. Mamá no me lo compró. Me compró otros, pero tenían otro tamaño.

Pedí para mi comunión un disco de Queen, me trajeron los "Grandes éxitos I"

En el primer aniversario de su muerte, se hizo el megarecital homenaje en el que cantó Bowie, Lennox, Elton John y los Guns´and Roses. La mejor versión fue la de George Michel. "Alguien a quien amar". Vimos en directo las cinco horas que duró el Homenaje.Yo lo grabé en VHS. Lloramos juntas. Le perdoné a mamá lo que había pasado un año atrás.

Todos los años, cada 24 de noviembre me pasaba el día escuchando los discos o mirando los videos. Obligaba a toda la familia a estar bajo los efectos de Freddie. Es sólo un día al año, decía mamá.
Era nuestro día de Freddie.

III

Ahora mamá no está.
No sé cuántas veces lloré por ella escuchando Queen.
Quisiera tener 9 años otra vez, y creer en un cielo en donde mi mamá y Freddie se encuentran. Él le canta Rapsodia Bohemia, mamá aplaude y baila con él "Cosita loca llamada amor"
Quisiera tener 10 años y no enojarme porque no me compró el poster de la 13/20.
Quisiera tener 15 años y volver a entrar a mi fiesta de cumpleaños con "Amor de mi vida"

Quisiera tener todos los años en que mi madre estuvo conmigo
Fue la madre más comprensiva, cariñosa y atenta que pudo con un ser demandante, inestable, suceptible como yo.  Eso fui siempre.
Sólo su muerte me ha templado.

Desde que mamá no está, siento que sigo en ese bunker preparado para el duelo.
Con el cielo gris sobre mi cabeza, una voz que habla incasablemente sobre su vida vida y un par de canciones de Queen de fondo.

miércoles, 23 de noviembre de 2016

Amazonas

el documental sobre el Amazonas
que dejo como música de fondo
habla de lo mismo
que la hoja de la planta
que toca apenas el piso
o el ave que trina incanzable

la naturaleza sabe reponerse
nosotros perdimos el hilo


descansar

permanezco al sol
desnuda y en silencio
como si sostuviera
la piel de un felino
que ha recordado
su nombre
y puede descansar

martes, 22 de noviembre de 2016

santa cecilia

no estoy esperando
entrar en esa foto
ni que aparezca algo
que pueda dar cuenta
con la mano
de esa música que se apaga

elegir una canción
es dejar tantas otras
atrás
afuera




devastación

todavía me pregunto
por qué llamaste
esa noche
de dónde vino
ese sonido helado en la madrugada

hay sueños en los que no truncaste
esta historia
y todavía nos besábamos
en silencio

me salva
no pensar en tu cuerpo
en tus ojos glaciares
o la devastación de los campos
con azufre

ahora releo
los mensajes que me dejaste
furtivos y equívocos
como lagartijas



domingo, 13 de noviembre de 2016

entrega

le entregué a la vida
mi poesía joven
me mantuve en silencio
mientras la vida me daba
una casa, una gata, un empleo

en esta herida que fui
ahora escribo
soy anciana en un cuerpo
que no ha sido madre
soy una voz que habla
sólo para su silencio


exilio

hubo algo en tu mirada 
que te hizo extranjero
de mi cuerpo
me vacié de amor 
y planté un muro

todavía no sabés
lo que es el exilio
estás viendo cómo acariciar 
un muslo
o prenderte para siempre al cuerpo

pero el cielo no entiende
recorre nuestro tiempo
sin dejar de decir
este el fin

martes, 1 de noviembre de 2016

el rayo


en la casa de mi madre
escuché la tormenta.
apretaba con fuerza mi amuleto,
como si eso me salvara
de los golpes en la tierra.

uno de los rayos
vino a través de la noche,
iluminó la habitación,
llenó el aire
con su perfume.

sentí mi cuerpo
doblarse de espanto
y supe que había dejado
de tentar a la muerte.

afuera,
la noche
puede ser terrible.
adentro,
todavía tenemos un techo.

ha llovido
todo el día
y seguirá lloviendo.


cae detrás

el cielo rosa anticipa
el sol de la mañana

la luz ante todo se anticipa

llueve al mismo tiempo
hay viento


una tormenta es un estado
todo lo que cae detrás
de la línea de los techos

atleta

Que hable del sexo
Que hable de la esponja blanda
De la sal de la piel del gemido

Te sabés parar
ante mí
desnundo
con el vaivén alado de los atletas griegos

Hay algo en tus ojos
similar al hielo
Fría estaca
de tu saliva

agitación

Mi cuerpo acompaña al cielo
Tiembla y tiemblo
estalla y mi cabeza duele
la sangre golpea las sienes
siento la misma agitación
que siente el viento
cuando se prepara para la guerra

arruinarse

Que alguien vea las luces en el cielo
oiga el viento
vea una tormenta
y se acuerde de mí
diga: a ella le gustaban las tormentas.

como yo recuerdo a mi madre
cuando entraba las plantas
y luego miraba el cielo violeta
cerraba la puerta de vidrio
para que no se mojaran
las cosas que podían arruinarse