miércoles, 9 de mayo de 2018

de nube y de polvo

Ayer limpié la tierra de nuestros altares
mientras esperaba con ansia un mensaje, el sonido de las llaves en la puerta 
un indicio 
dije los nombres de cada una de las piedras
las amontoné sobre la luz
para que el mundo tuviera una forma
el sentido 
puede ser el que vamos encontrando
o también este azar escandaloso
que se escapa.
Estaba templando mis manos bajo el agua cuando llegaste
cerré la canilla
vi el dolor que traías en los ojos
pegada la voz a la tierra
atenta al movimiento del cielo.
Te abracé. Te dije que ya era hora.
Te hiciste de nube y de polvo.

la plancha

Hacer las cosas que tengo ganas de hacer
cuando termine las cosas que tengo que hacer
Equilibrar deseo y deber
para que el cuerpo sepa
que está bien, que ya entendí, que voy a dejar de insistir.
Dicen soltar, yo pienso en dejarme ir,
como si hiciera la plancha en un mar profundo

hornero

Acabo de ver las alas de un hornero
brillar bajo el sol
naranjas ocres preciosas
y luego cerrarse
justo al tocar el cordón de la avenida.
Estoy convencida
de que la ciudad no existe para el hornero,
ni el infierno, ni el tiempo.

tren

Por alguna razón
el tren tarda en salir
veo cómo las golondrinas
dan vuelta sobre el vagón abandonado 
que está cerca del puente 
pienso en las horas
que estuve sin moverme 
pegada más a la desidia
y la falta de sueño.
Avanza ahora el tren
y brilla el sol
sobre los galpones
monto mi voz
a la voz del tren
antes de que se termine la estación
y caiga en el vacío el planeta
quiero que sepas que estoy en camino

tristes

Qué tristes estaremos
que celebramos un arcoiris 
vemos señales de luz
donde sólo puede haber oscuridad encontramos en el dolor de las manos
la sanación
la cura alguien dice
está en un código
lo buscó en esta
alimaña que late invisible
y nos une.
Qué grises somos
y que brillantes
casi comprendo
que la pena es voz
de una mujer herida
este mi cuerpo herido
ya no es mi cuerpo herido
le abrí un tajo de papel
y sangró todo el día
Qué pequeños ante el mundo

la furia el silencio
quiero volver al estado
en el que me desdigo
y me hago doble de mi espejo

noticias


Leí ayer:
Cayó un metereorito
y produjo un temblor
en Detroit.
Hoy los portales anuncian
la cercanía
de un asteroide peligroso 
a la Tierra.

Te digo,
yo soñé con estos males
y en todos mis sueños
la Tierra ardía

Me pregunto cuánto tardará
en bajar la marea
luego del desastre
Cómo se verá la ciudad
sin su infierno
Podré dormir mejor
después del mundo

Vendrás por aire o por tierra o lava
a traerme tus noticias

extraño


Qué extraño se vuelve el mundo
de pronto era movimiento
y ahora es noche

Hay una luz que no quiere apagarse
en mi casa
parpadea incesante
aunque todo esté oscuro

Dormir no es una opción
pero intuyo
un absurdo más allá
de mi cuerpo

Huelo el peligro inminente
de eso que se nos escapa
la posibilidad sin palabras
de tener que irnos antes de tiempo

Acaso la luz sea un aviso.

Nuevo Mundo

Otra vez vuelvo
a casa
desde el oeste
abro la puerta
dejo el peso 
de las cosas vacías 
bebo agua 
el cuerpo tuvo un viaje propio
del que no puedo decir más
que manchas de colores
que veo con los ojos cerrados
y el dolor insistente
similar al quejido de un tren
cuando ha recorrido siglos
Mañana el día se parecerá a este
pero yo supe dejar atrás
las ruinas dentro de mí
soy a cada rato
una sobreviviente
pensaba antes de llegar
antes de abrir con mi cuerpo
el Nuevo Mundo

la hora del Insomnio

Escribo 
con la fe puesta
en la palabra que sana
y da sosiego 
y paz
a un cuerpo que no duerme
hace más de 36 horas 
Si está leyendo
esto pídale por mi alma
a la gloriosa Artemisa
Madre salvaje
de los bosques
Ahora
Y en la hora del Insomnio
Ámen

Luna en Escorpio

Otra vez está lloviendo
y el problema no es 
la lluvia
sino lo que evoca

Ojalá se calmen 
esos gritos
sin que vengan
a buscarlos

Tal vez
esta bruma
no sea mi peso
sobre el cuerpo
sino
el paso de la luna
invisible de la tormenta

por el signo inefable
 de las brujas

La Feria

Ayer fui a la Feria.
Había muchos libros.
Gente querida, también.
No encontré los baños. 
Me miraron varias veces con cara rara.
Un empleado me dijo que era
porque llevaba los libros en la mano
y no en una bolsita.
No me dieron bolsita, le dije.
Después conseguí.
Había descuentos.
Me traje los libros que quería leer.
Estaba cansada pero me quedé
porque estaba la feria de plaquetas
Fue lo mejor.
Casi que me sentí viva otra vez.
Joven, punk y del conurbano.
Sin tanto peso, eso, más liviana.
Cuando no me dieron más las piernas,
me fui.
Llegué a casa a medianoche.
Comí una banana.
Me fui a dormir feliz.
La vida también

es esto.
Registrar. Recordar. Escribir.

el costado

Qué hacemos
mientras el mundo se cae
¿dejamos de vivir 
o nos paramos de manos?
Tengo miedo, sí,
de la crueldad sin límite
y el dolor ajeno
No, yo no temo
por la gotera en mi techo
ni la helada noche
pero sé que hay alguien más
en un parque cercano
que sabe del desamparo.
Cuidemos de las fieras
nuestras casas
tengamos la paciencia de cada célula
que ruge de vida
hasta que se agota de muerte
No olvidemos el costado
por donde nos sangran lxs otrxs.
Van a venir por el aire, es cierto
Querrán nuestra tierra, es cierto
pero ya sabremos respirar agua
y sembrar el lodo del océano.

lunes, 26 de febrero de 2018

crujido

Mientras intento dormir
pienso
en las cosas que perdemos
el olvido leve
que se vuelve tragedia
Temo acostumbrarme
a esto de no llevar nada
sobre mi pecho
ni siquiera la certeza
de que mañana haya
debajo mío
un piso
Miro las puertas del placard
la ropa que nos viste
es la misma que nos desnuda
pienso 
en una hoguera
de remeras rayadas
alguien grita
pero no es eso
lo que escucho
Estiro los dedos
hasta forzar
un sonido interno
cada crujido
me recuerda
que lo único que sostengo
es este cuerpo

fractal

No vengas al mundo
a decir sólo tu nombre
ni hagas de tu nombre
el epicentro

Tenés que saber
cada célula es un fractal
de aquello que lo contiene

Habrá en el mundo
más dolores
que estos tuyos

Tendrás que poner
más allá
de esta cama permanente
la potencia
y la vida

Salir a buscar
tu propio fractal

sábado, 24 de febrero de 2018

un galán en la tele

un galán dice
en la tele
que está estudiando ´
astrología
dice que después de
la muerte de su padre
se acercó al chamanismo
o el chamanismo se acercó a él
dice que hay que encontrar
antes el animal de poder

el animal de poder

después habla de su película
el romance que no fue
los cuadros que hace
y los textos que escribe
y deja en un cajón

después
en el mismo tono
dice que esa noche tiene un cumpleaños
y van a un corte

hago el trabajo de ver al hombre
detrás del hombre
la ilusión detrás de la imagen
el tiempo que cae
cuando dice

la muerte de mi padre


viernes, 23 de febrero de 2018

supernova del cerrajero

en Rosario
un cerrajero 
pudo captar 
una supernova
en la cola de una galaxia 
cercana

dicen que las supernovas
nunca habían sido registradas
que el ojo humano
nunca había podido ver
la explosión
que procede
la energía que emerge


eran teorías 
hasta que el cerrajero
alzó su ojo
y disparó
una, dos, tres, diez, veces
hacia esa luz
que cambiaba

intuía pero no sabía 
qué estaba viendo, dice el cerrajero
parado en su terraza
sonríe orgulloso 
del azar primigenio
que hace a la vida y a la muerte.

eso me parece que es poesía. 

miércoles, 14 de febrero de 2018

caja que tiembla

Apenas llego a casa,
me desnudo,
salgo a la terraza,
le hablo a la luna
aunque no la veo
le digo, Madre, gracias
cierro los ojos
de cara al horizonte
y escucho el viento frío

adentro
otra vez
siento insectos
que no existen
tocándome el brazo
titila  la luz,
se prende y se apaga
le digo ya basta
a esa fuerza que busca
dónde y cómo salir

toco una parte de mí
que parece de tierra
¿a qué huele mi cuerpo
la carne de mi carne?,
¿al fuego que purifica
todo lo que toca?

antes de dormir,
no ejerzo
el poder del sonido,
soy este silencio,
esta caja que tiembla
cuando habla sola

jueves, 25 de enero de 2018

acostumbrarse

Cómo es eso
de que te acostumbraste
tanto al dolor
que ya no decís 
al mundo
cuánto te duele

 lo vas midiendo
 en días que no tiemblan
 en ríos de sangre que fluyen
 donde antes no 

 Como si midieras
 ahora
 la extrañeza
 de un cuerpo sano
 más que la rutinaria estampida
 de tus manos

ilusión

descansamos para ver
la final de tenis de mesa
entre japón y china
todo el tiempo creí
que el saque era con la cabeza
vos decías que la forma
en que se arquean
confunde el plano
del objeto con el cuerpo
a mí me parece
que la ilusión
no es óptica
sino simbólica
el centro de poder
está siempre
donde tiene que estar
por ejemplo, yo ahora
pondría mi cabeza
en el vientre
sería un nodo vivo
de mis entrañas
dejaría que todo lo que diga
y haga sea visceral
o no sea nada

martes, 23 de enero de 2018

duelo

En esto también
el aire
se parece al duelo
alojar el dolor del mundo 
recortar el vacío
y llamarlo
 amanecer de todos los días
 noche que cae sobre un témpano
 árbol que muda sus dedos hacia la primavera

lo peor

Lo peor
es acostumbrarse
porque entonces significa
que aceptamos

ya no damos pelea
no levantamos resistencia
no decimos
 tengo que curarme

tumba

Me heriste profundo
en la nieve
un rastro hecho
con días violentos

Cada tanto
hago esto de volver
a escribirte
pensar en tu nombre
en el hijo que no vino

sabor

no quiero exagerar
pero mi memoria extrema
recuerda detalles inútiles
como el color de la camisa
de una chica en ese recital

ni siquiera recuerdo
el nombre de la banda
pero podría inventarlo
tampoco es ciert
que recuerde cuánto te amaba
cuando te veía venir hacia mí 

aunque podríamos seguir
el relato detrás de esa noche
hay fotos que prueban
que cerrabas los ojos al besarme

y comprendo que dura y tajante
fue la lluvia
o que oprimido estaba el aire
cuando no querías hablarme
o  qué sabor extraño
 tenían mis lágrimas. 


desesperación

Recuerdo
que a veces  me llamaba  
en una voz que no se parecía
a la suya

Acaso como un eco
su  voz decía
Afuera, la noche y una erinia que espera

Yo me acercaba 
y le sostenía la mano 
Le decía que todo estaba bien
que no me había ido 

Ahora sostengo
una taza
o el papel donde escribo

Y a veces temo
que  mi madre ya no esté 
en la memoria del  mundo
y sea esta  desesperación 
la que marque mi ritmo 

las novelas turcas

I

Ellas hablan de la novela turca
El sultán que no se casaba nunca
Beben un té y se miran a los ojos
El pelo cobre de la tintura
Las manchas en las manos
El tono de su voz
Miro con desprecio sus pies
Las fantasías que brillan de su cuerpo
No es oro 
Lo que brilla
No hay nada sano en ese rostro
Y sin embargo 
Ellas están vivas
Y mi madre no
Ahora dicen que el sultán fue
Real conquistador de tierras exitoso
Suspiran cuando hablan de su vestuario
Dicen que prefieren
Levantarse de la cama
Ellas que están vivas
Y ven crecer a sus nietos

II

Dicen que los vestidos
de las mujeres de la novela
son una preciosura
Y así la princesa 
Y asi la dama
Y así la sirvienta 
No se preguntan por qué 
Ni dudan del brillo de las fantasías 
Ni temen no poder abrir los ojos
O quedarse sin aire
como temía mi madre


mochila

Volver al Sur
nunca se pareció tanto
a volver al Oeste como hoy.
Con la luna caída
y la sensación de las calles desierta
y de los árboles.
Con las ganas de no tener
que dormir hasta mañana
y quedarse con las amigas
y llevar algo de poesía
en la mochila.

otras

Sé que este calor anormal
y no el frío de junio
es el que enferma
pero el mundo se ha empeñado
en maltratar al invierno
olvidar el fuego y el refugio
quieren vivir bajo el sol 
pero han olvidado respetar la noche
Mientras tanto la lluvia
tarda en llegar
Se anticipa y se quita
dudosa del cielo
Los huesos duelen
bajo este crepitar húmedo
bajo el silencio del solsticio cercano
hablan de tiempos
en los que la Tierra y el Agua
eran otras

dos años

Cuando la pena es íntima
se vuelve cómoda y segura
como un refugio
no se mide con palabras
hay un brillo sobre nosotros
pero no podemos verlo
me inquieta perder el hilo 
o que las flores se doblen
sobre el mármol
las aves cantan
sobre los árboles desnudos
la llovizna dibuja
diamantes
en el pelo de mis hermanas
mi hermano me sostiene la mano
para darle calor
y todos nos quedamos
en silencio
un rato largo
miramos tu nombre tocar la tierra
sé que esto es apenas
una manera de
ponerle días a tu ausencia
llamar con tu voz
lo que nos habita
lo que nos hace hermanos.

Dos años es tanto tiempo.

una galaxia

Me inquieta
el movimiento incesante de los astros
Cómo todo ocurre sobre
nuestras cabezas
y nos quedamos
en el espacio recortado
por la memoria
Todo lo que hacemos
debería recordarnos
el Origen,
aun temblar ante el viento,
prender una hornalla,
calentar el agua.

Tal vez sea eso,
este poema:
un canto diario que me despierta.

Hoy también estoy viva,
me duele la mano
Y hay una galaxia entre nosostros

Santiago Maldonado

Desperté pensando en las mujeres desaparecidas.
Desperté pensando en los niños desaparecidos.
Desperté pensando en los pueblos desaparecidos
Y los árboles y los ríos envenenados,
los animales que se extinguen bajo la crueldad humana
¿Qué ser oscuro pudo haber engendrado tan terrible consciencia?
Hacer de la muerte un negocio, beber de la sangre y la vida de este mundo
Desperté pensando en los pibes que mató la fuerza del Estado, de hambre, de exclusión, de desidia.
Desperté pensando en la sangre que mancharon las calles y los puentes, ¿te acordas de ese diciembre oscuro?, ¿te contaron de esa plaza bajo las bombas?, ¿supiste alguna vez el nombre de esos desaparecidos?
Todo está ahí, en nosotrxs, latiendo
Todo está vivo, en nosotrxs, latiendo
Desperté pensando en el nombre de un desaparecido
Desperté porque está desaparecido
Desperté porque hay tantxs otrxs desaparecidxs.
Desperté.

sueño de septiembre

Soñé con un río al que íbamos a buscar el atardecer pero estaba cubierto de basura. Vos estabas esperando a un gurí para mostrarle algo, decías. Había gente en los techos jugando con el sol. Nosotros estábamos en un techo jugando con el sol. Pero después volví al río sola, quería encontrar algo, entender. Me crucé con inversionistas que hablaban de tirar abajo las paredes, quemar la basura, echar a la gente del barrio. Me detuve porque del agua podrida asomaba la cabeza un animal. Y se irguió enorme. Era un camélido ataviado con brillos. Iba montado por una mujer morena, con una túnica negra que también tenía brillos. Los vi tomar un camino hundirse en el agua marchar hacia el este. Los seguí.Yo no lo había visto pero seguí caminando y el barrio era de casas bajas precarias y una calle de tierra que daba al río. Entré siguiendo a un niñito regordete que reía dos años tenía no más a una casa. Miré los cuartos, las paredes, la luz de la lcocina. El niño no estaba se oía música. Al salir me dijeron está acá Carolina pero igual me fui. Me esperaban mis hermanas. Nos íbamos a juntar a merendar. Fuimos con Naty a comprar algo dulce para comer a un lugar extraño. La empleada que nos servía escribía las superficies con comida. Así se ganaba la propina. Tenía una letra hermosa, un mechón de rulos rojos salía por debajo de su cofia. Mientras esperábamos alguien pidió su picada para los amigos y se tiró boca abajo para que le escribieran el cuerpo. La empleada le preguntó qué escribir a mi hermana y enseguida dibujó unas líneas sobre la cintura. Me preguntaron a mí y dude y dije y me desdije tantas veces que la muchacha sufría cada vez que le dibujaban y borraban las letras. Entonces tomé yo el tenedor y escribí sobre su espalda, tratando de no herirla: Ni ayer ni mañana, HOY.
Desperté. Tenía los brazos dormidos. No sentía mis manos. Me duelen ahora que escribo. Pero tenía que decirlo. Es HOY.

e mail

Antes de dormirme
escribo en un mail
otro poema
es la única manera de escribir
que tengo estos días
casi como si esperara
poder enviar un mensaje
y no un poema
o que el poema fuera el mensaje.
Pienso en la importancia
de los abrazos
y en que quisiera capturar
para siempre este cielo violeta
y su aullido
como si temiera perderlo
como si comenzara a entender
que ningún cielo puede ser el mismo